sábado, enero 26, 2008

LEER Vidiadhar Surajprasad Naipaul


El pequeño pueblo del oeste de Inglaterra en el que vive V.S. Naipaul sólo aparece en los mapas más detallados. No es fácil llegar hasta su cottage de ladrillo rojo, rodeado de setos y baches.
Siempre me he visto a mí mismo como un intruso, un extraño en Inglaterra”, asegura Naipaul, “aunque eso nunca me ha producido el menor dolor”(...). Desde que nació en Trinidad, descendiente de indios, “siempre flotaba ligeramente en el mundo”. Aquello ocurrió en 1.932, en la familia de un periodista del “Trinidad Guardian” que escribía relatos. Después, el chico listo de la casa ganó una beca en Oxford que subrayó su extraña sensación de vivir en una burbuja. “No tenía amigos estudiantes con los que hablar. Mi tutor era un hombre realmente encantador, pero sin criterio en literatura”.
La ambición”, confiesa ahora, “era parte de mi personalidad”. Naipaul ha escrito mucho sobre sus primeros intentos de escribir en una habitación de mala muerte del norte de Londres, tratando de ahorrar cuartillas. “Cuando dejé Oxford, no tenía medios para ser escritor. Pero aprendí a arreglármelas por mi cuenta, como los artesanos”.
Y lo dice Naipaul, que en los años sesenta se benefició de la moda de narradores caribeños que triunfaban en Inglaterra. “Sí, tuve suerte por pertenecer a la cosa nueva”, reconoce Naipaul, “pero aquellos escritores se desvanecieron y me vi solo de nuevo”.
Y Naipaul cita a autores como Camus y Coetzee que “llegaron a sentirse realmente fatigados con el tema de la raza, con sus inexorabilidades y sus presiones para hacer siempre lo correcto”.
Este es un asunto muy delicado. Si uno ha nacido en Trinidad, donde hay dos grupos étnicos principales (asiáticos y negros), tiene una identidad racial. Y lo acepta. Porque rechazar la propia identidad sería de locos. Yo creo que en toda mi obra hay una evidente aceptación de mi identidad. Pero nunca he apartado a nadie”.
O sea, ¿qué Naipaul es un autor sin padres literarios? “Escribí desnudo y sin defensa alguna”, confirma. El escritor apenas reconoce ahora su tardía pasión por Guy de Maupassant. “Quedé completamente deslumbrado al leerlo. Pero no ejerció ninguna influencia sobre mi”.
De hecho, Naipaul es hostil a cualquier magisterio. En su opinión, “la prosa narrativa está en un proceso de cambio absolutamente necesario. En el siglo XIX, la novela procedía del deseo de describir la sociedad. En la actualidad, no hallo en mí mismo ese deseo. Lo que tengo en contra de esta clase de literatura es que todo el mundo puede hacerla. De hecho, todo el mundo se dedica a escribirla. Esto la ha degradado y ha hecho obvia la necesidad de que la novela sea algo más de lo que ahora es. La escritura interesante es la que se hace por primera vez”.




http://militeraturas.ning.com/group/entrerenglones

*(Extraído de El Mundo, Diciembre, 2007).-